Los días que cambiaron el siglo XX

Después de un mes de lo más "entretenido" sin parar ni un sólo segundo, he logrado sacar algo de tiempo para volver al blog y contaros en qué estupendas aventuras he gastado mi tiempo libre (el poco que he tenido, la verdad).

En las dos últimas semanas he cargado (literalmente) a diario con uno de los best sellers más voluminosos de los últimos años. Sé que muchos teneis por regla general un odio acérrimo a esta clase de libros que, como lee todo el mundo, no pueden ser buenos. Yo, ni los defiendo ni los aborrezco. Simplemente creo que es muy fácil críticar sin antes haberlos leído y que, como en todo lo que no rodea, hay de todo: best sellers muy buenos, típicos, malos... Creo que una persona no se lee un libro de porque esté en la lista de los más vendidos, sobre todo, porque hay algunos tan voluminosos que si no estás habituado, no son nada sencillo.

En esta ocasión, ha tocado La caída de los gigantes de Ken Follet. Llevaba mucho tiempo en la lista de libros pendientes de leer y decidí que este verano era el momento perfecto ya que deduje que que 1.021 páginas no serían rápidas de leer.

Ken Follet abandona en esta ocasión la Edad Media en la que transcurrían sus éxitos anteriores (el famoso Los Pilares de la tierra y Un mundo sin fin, ambos, insustituibles) para comenzar un ciclo de denominado The Century, compuesto por tres obras de las cuales la primera es esta, que estarán situadas en el siglo XX y los acontecimientos históricos que han ocurrido este siglo.

La caída de los gigantes narra la vida de diferentes personas de diversas clases sociales a las que la llegada de la Primera Guerra Mundial les hace cambiar radicalmente su modo de ver el mundo.

Todas estas historias se entremezclan tocando temas tan diversos como el sufragio femenino, la revolución rusa, la diferencia de clases, el pacifismo, los sindicatos obreros y, por supuesto, la guerra de trincheras y el sinsentido que significa la violencia armada. Para ello, se mezclan personajes ficticios con personas reales, representantes de la situación política del momento.

Rememorando mis clases de Historia mundial, retomo mi sensación de la falta de consistencia que tuvo el comienzo de la Primera Guerra Mundial, la "carnicería" en la que se convirtieron los campos de batalla en los que, por culpa de la propaganda de los países en guerra, lucharon numerosos jóvenes que no tenían ni idea de a lo que se enfrentaban y que sólo luchaban por el odio que generaba la guerra y por pura supervivencia. En ese sentido, se reflejan muy bien la visión de los soldados en la excepcional obra Sin novedad en el frente de Erich Maria Remarque.

Además, leyendo el libro, detecté mi temor con la similitud que pueden tener ciertos momentos del pasado con la situación actual que está viviendo Europa. Sólo espero que todos los países y sobre todo, los políticos que los gobiernan, hayan aprendido de sus errores del pasado. Como ejemplo, una cita del libro:
"Las vejaciones a las que sometes a los demás regresan, tarde o temprano, para torturarte". 

Como dato curioso, me sigue indignando la imagen que se tiene de los bibliotecarios en el mundo que nos rodea. Por ejemplo, en este libro, uno de los personajes, Bernie Leckwith, es un bibliotecario aburrido, cuadriculado y soso que no tiene ningún don de palabra. Todo ello, representado en la frase "como todos los bibliotecarios, no soportaba que la gente escribiera en los libros", la cual me llama mucho la atención porque en este campo, como en todos, cada uno es diferente. Yo considero que no existe nada mejor que apuntar y señalar en el libro lo más importante y tu opinión en los márgenes. Eso sí, siempre y cuando sea tuyo y no de una biblioteca, para que cada uno pueda sacar sus propias conclusiones. Sin embargo, existe cada ejemplar en los estantes que tienen ya vida propia fuera del significado del libro. En cualquier caso, creo que ya está bien de tópicos sobre bibliotecarios. A ver cuando se describe la situación real de los muchos bibliotecarios que trabajan activamente por dar el acceso a la cultura y a la información a toda la población.

Nada más por ahora, sólo esperar que os guste y os enganche tanto como a mí, y vuestras opiniones que la obra ya ha pasado por vuestras manos. A los que no lo hayais leído toda mi fuerza para empezarlo, que sé que cuando un libro comienza con un listado de cuatro páginas con los personajes asusta un poco, pero merece la pena.