Inferno de Dan Brown |
Retomando autores que hacía años que no tocaba, estas semanas le ha tocado el turno de volver a caer en la garras de Dan Brown y su último libro, Inferno. Lo primero de todo, tengo que decir que empecé a leer este autor a principios de los 2000, con El código da Vinci y me gustó bastante la mezcla de búsqueda, descubrimientos de grandes genios como Leonardo y el análisis de los símbolos de la historia del arte que realizaba el protagonista, Robert Langdon, me enganchó por completo. Pero la sensación de adicción completa llevó cuando me leí Ángeles y demonios. Esas carreras a contrarreloj por Roma para descifrar los símbolos de los Iluminati, una antigua secta, para evitar que explote el arma más mortífera, la antimateria, todo ello durante un cónclave que tiene Roma y la Ciudad de Vaticano llenas de gente. Fue uno de motivos por el que hace años me acerqué a la historia del arte, gracias a los archivos secretos del Vaticano, el Panteon, El éxtasis de Santa Teresa de Bernini, etc. Sin más que añadir, uno de mis libros preferidos del autor, sin lugar a dudas. No voy a a entrar a valorar las adaptaciones cinematográficas que se han realizado de ambas porque me resultaron decepcionantes, insulsas y poco cercanas a los libros. Un tiempo después leí también La conspiración, que no me disgustó del todo, pero me dejó un poco saturada.
Sinopsis
El libro comienza cuando Robert Langdon despierta desorientado y dolorido en un hospital de Florencia sin
recordar nada de lo que ha ocurrido en las últimas treinta y seis horas. Además, lo único que le viene a la mente son alucinaciones con una mujer desconocida que le manda mensajes crípticos que no logra descifrar.
recordar nada de lo que ha ocurrido en las últimas treinta y seis horas. Además, lo único que le viene a la mente son alucinaciones con una mujer desconocida que le manda mensajes crípticos que no logra descifrar.
Florencia, uno de los escenarios de la novela |
Pronto descubrirán que forman parte de la maniobra de un asombroso genio obsesionado con la Divina Comedia de Dante Alighieri y lo cercana que está el mundo de su autodestrucción.
Aquí comenzará una carrera contrarreloj para intentar descifrar los enigmas que un terrorífico científico ha creado y salvar así a la Tierra de su destrucción.
Crítica
Inferno es una vuelta a la narrativa de Dan Brown con la obligación de Robert Langdon de salvar el mundo a través de sus conocimientos de símbología del arte. La atención de toda la obra se centra en la Divina Comedia, más concretamente en su poema épico Inferno, y en su autor Dante Alighieri, como ocurre en El Código da Vinci con Leonardo. También tiene cierta similitud con Ángeles y demonios en la idea de salvar al mundo a través del análisis de las obras de arte y ambos ambientados en Italia.
Centrándonos ya en la obra propiamente dicha, está narrada por los diferentes personajes protagonistas, en presente y recordando aspectos de su vida pasada que pueden ser útiles para desentrañar parte de la historia. Todo ello sin descubrir las sorpresas que nos tiene preparadas el autor, que no son pocas.
Otro de los aspectos importantes es el recorrido de los protagonistas con los lugares y monumentos, perfectamente descritos por el autor. Yo, con mi curiosidad innata, me he pasado toda la novela con el teléfono móvil en la mano buscando la representación gráfica de todas las obras que aparecen. Para ello, he descubierto el blog Los lugares y pinturas tras el libro Inferno de Dan Brown, que recopila maravillosamente todas las obras y con el que he satisfecho todas mis curiosidades. Con todo ello, tengo que decir que, al viajar con la mente a estos lugares, mi cuerpo se muere de ganas de volar hasta Florencia y el resto de ciudades que aparecen para descubrirlos en persona.
A modo de adquisición de conocimientos (e intentando desvelar lo menos posible), me ha sorprendido mucho descubrir la existencia de movimientos científicos como el transhumanismo que defiende el empleo de nuevas tecnologías para corregir aspectos del ser humano como el dolor o el envejecimiento y me preocupa el mal uso que se pueda hacer de ello. También desvela los preocupantes datos estadísticos, no siempre conocidos por todos, del crecimiento exponencial que está sufriendo la población del planeta, mientras que los recursos naturales que necesitamos se agotan a pasos agigantados. Da para reflexionar.
Jardines de Boboli, uno de los maravillosos lugares de la obra en Florencia |
Y con todo esto, poco más puedo añadir sin desvelar nada importante. A mí me ha gustado, y pese a que no es una novela corta, se lee muy fácil ya que es muy adictivo y engancha bastante al lector.
Citas
Las decisiones del pasado determinan nuestro presente.
Los pescadores griegos, al nadar por un oscuro túnel en la búsqueda de langostas, llega un momento en el que ya no tienen suficiente aire para deshacer el camino. La única posibilidad es seguir nadando hacia lo desconocido… y rezar para encontrar una salida.
Recuerda esta noche, porque marca el principio de la eternidad.
En tiempos peligrosos, no hay mayor pecado que la pasividad.
Hola!
ResponderEliminarMe ha encantado vuestra entrada y vuestro blog. Ojalá pueda repetir también dentro de poco el mismo recorrido. Por cierto, me gusta mucha la idea de recorrer una ciudad a través de una novela. ¡Felicidades! Aquí teneis a una nueva seguidora.
Un saludo