Mi viaje literario

Último mes del año. Mes de regalos, prisas, estrés, comidas, familias, reencuentros... Mes de reflexión de lo que ha sido este año y deseos y esperanzas para el que viene. Personalmente, creo que he cambiado mucho desde hace un año. Sé que sonorá demasiado optimista en los tiempos que corren pero este año he cumplido uno de mis sueños. Rectifico. Algo me pude imaginar aquel 16 de diciembre de 2011 cuando, harta de tanta burocracia, me moví hasta que conseguí que me confirmaran que habían aceptado mi solicitud de prácticas. Aún recuerdo el momento en que lo recibí. Aún lo guardo con cariño. Aún puedo disfrutar lo que hace un año califiqué de sueño. Volviendo a la literatura, el último libro que he leído posee unos tintes filosóficos y reflexivos los cuales no son santo de mi devoción. Llegué a él gracias a un pequeño "club de lectura" formado de forma espontánea a través de un grupo de Facebook. De esta forma, alguien propone un título y ponemos una fecha para comentarlo en

Últimamente he recuperado mi mejor vena lectora, que llevo acabados dos libros en una semana. Y después de terminarlos siempre me ocurre lo mismo: un vacío existencial de haber dejado en el parte de tus sueños, pensamientos, etc. Siempre me pasa lo mismo, pero se supera empezando otro. Soy muy fan este escritor y de sus libros. Este es el quinto libro suyo que me leo y, aunque como dicen algunos, son todos muy parecidos, siempre pasa lo mismo, siempre ambientados en la Barcelona más siniestra y oscura, tienen algo que te hacen leer sin parar y engancharte a ellos de manera sorprendente. El prisionero del cielo Esta vez el libro con el que he pasado mis últimas horas ha sido El prisionero del cielo de Carlos Ruiz Zafón.Con él, he superado mi récord de lectura de este escritor, ya que he tardado 3 días y medio (hora arriba, hora abajo). Con él, se añade un nuevo libro al ciclo de novelas del Cementerio de los Libros Olvidados. En esta ocasión, está ambientado en la Barcelona de